Una transacción se considera fraudulenta cuando no ha sido autorizada por el titular de la tarjeta de crédito, y este tipo de transacciones pueden convertirse en un contracargo, ocasionando perdidas de dinero para su negocio.
Cuando se sospecha de una posible transacción fraudulenta, sigue los siguientes pasos:
Detén la compra y no realices la entrega de producto o servicio.
Válida los datos de contacto del comprador y asegúrate que sean reales.
Comprueba que la dirección de facturación, sea la misma que la dirección de entrega (Solo aplica para venta de productos)
Utiliza nuestra herramienta de validación de transacción.
En caso de no poder validar la transacción, es importante que se realice la devolución de la transacción en el menor tiempo posible, solo así podrás minimizar las probabilidades de que no se convierta en un contracargo.
Aplica procesos de control y revisión en tus transacciones a través del panel de control de PagueloFacil. Revisa nuestra guía de prevención de fraude para que puedas estar alerta de tus transacciones.